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Vayamos a ver cuáles son:
1.- Distraer Al Pueblo De Dios Con Conversaciones
Cuantas veces muchos coristas,
lejos de estar en misa, se la pasan hablando del chisme del día anterior, o de
los problemas que cada quien tiene en casa, trabajo o escuela. Distraen a la
gente si es que cantan a un lado del presbiterio, o se les olvida apagar los
micrófonos escuchándose el susurro en los altavoces o bocinas. Muchos
coordinadores piensan que cuando el coro se sitúa en la parte de arriba las conversaciones
no se escuchan pero eso es un error, ya que si la parroquia contiene acústica
para la propagación del sonido, este se reproduce y se escucha abajo.
Se recomienda no dialogar durante
la misa, a menos que sea necesario por motivos de improvistos, sin embargo, un
esquema bien ensayado, no tiene por qué haber dudas de él.
2.- No Avisar Al Padre De Los Esquemas De
Cantos Que Van A Cantar.
¿Les ha ocurrido que de momento
el sacerdote les pide cantos de manera improvisada o al momento? Pues eso
ocurre por falta de dialogo entre el celebrante y el coro en los días previos.
El sacerdote en todo momento,
debe estar dispuesto a atender, a resolver dudas y a proponer cantos para
evitar cantos improvisados durante la misa, ya que esto provoca que muchas veces
se toquen con acordes que ni siquiera son los adecuados o con voces totalmente
desafinadas porque la mitad del coro ni siquiera se los saben. Cuando sucede
esto, vemos caras de coristas intrigadas, asustadas y dando un show de canto
mal hecho. Si hasta ese momento cantaban impecablemente de acuerdo a su
esquema, ahí todo se vino a estropear y algunos terminarán sintiéndose
humillados y avergonzados.
3.- Cantar Solo Para Exhibir Su Talento.
En mis años de experiencia,
aprendí como coordinador, que muchas personas entran al coro solo para lanzarse
al estrellato, para darse a conocer ante el público. Crean una especie de
espacio, dentro del cual si no se les da las partes más importantes de los
cantos en solista, tienden a incurrir en el enojo o en la discordia. Dejan de
acudir, empiezan a faltar o simplemente cambian de coro como suele suceder.
De ninguna manera, el coro es un
lugar para exhibir el talento vocal o musical, o que lo utilicen como un
trampolín para lanzar a la fama al cantante o músico. Aún recuerdo
coordinadores que durante los cantos, se paseaban con su guitarrita en medio de
sus compañeros al cantar solista, como dando a conocer al mundo: Aquí yo soy el
coordinador y canto con mi preciosa voz los solistas.
4.- Afinar Instrumentos Durante La Misa.
Algunas veces has escuchado a lo
lejos EL din, din, din durante la misa?
Pues es precisamente un fulano o fulana que se le desafinó la guitarra. Muchas
personas llegan tarde y todavía con descaro se ponen afinar la guitarrita,
mandolina o el ukulelito pensando en que es despacito y que nadie los oye. Si
no te das el tiempo para llegar a tiempo a la Santa Misa, como pretendes darles
las sobras de tu tiempo a Dios?
Dedica tiempo para tu camino, y
toma en cuenta aun así, más tiempo para los imprevistos que puedan suceder en él.
Si tu instrumento se desafina por algún cambio de cuerdas, sobre todo la
primera y la 4ta cuerda en el caso de guitarra porque son las que se rompen
más, es recomendable desde el día lunes hacer el cambio, restirando todos los días
con tu mano para irla tensando más y no esté muy aguada el día que la uses.
5.- Usar Ropa Extravagante.
Una vez conocí a una persona que
iba al coro con una playera, en donde tenía el dibujo simpático de 2 nalgas. Su
dibujo era como una especie de meme, sin embargo por muy chistoso que fuera, no
era ropa adecuado para un integrante de coro. En lugares de extremo calor y
bochorno, también alguna vez conocí a personas del coro que iban con
ombligueras y en shorts. Para entender cómo vestir correctamente, veamos el
ejemplo de María y los santos a través de la historia. Mucha gente prefiere
vestir pantalones en los que no cabe y por tanto no es adecuado para un
católico.
6.- Tocar El Pandero Todo El Tiempo.
El pandero es un instrumento que
representa la alegría, por lo que es muy adecuado usarlo en el tiempo de
navidad durante los villancicos. Yo siempre me he preguntado, ¿cómo es posible
que el coordinador o quien toca el pandero, pueda usarlo cuando durante el
Señor ten piedad, que es cuando el pueblo de Dios pide perdón a Dios por sus
pecados? Lo mismo ocurre durante el Agnus dei o Cordero de Dios, cuando el
pueblo clama Ten piedad de Nosotros.
Panderazos y guitarrazos cuando
se pide perdón a Dios durante el Kyrie no es la mejor forma de hacerlo.
7.- No Anotar Los Esquemas En Una Libreta.
Cuantos de ustedes han visto los
ojos saltones de compañeros quienes ni siquiera se tomaron la molestia de
anotar la lista de cantos y no saben que canto sigue. Muchas personas hojean y
hojean sus cantorales porque no tiene índice y no anotan en sus esquemas de
cantos las páginas donde encontrarlos.
El beneficio de los esquemas es
que en él se anotan las páginas de los cantos, o al menos dicha lista pueden
preparar previamente las hojas de cantos en caso de no tener uno hecho.
8.- No Vocalizar Quienes Cantan.
Si no se vocaliza empieza la
tosedera muy rápidamente. La voz se corta y la garganta se cierra a las notas
altas. Para quienes tienen experiencia, sabrán muy bien que cuando no se
vocaliza antes de la misa, muy probablemente no llegará a las notas altas y la
voz se tapará como en muchos casos. Muchas personas al término de la misa, no
pueden hablar, producto de una mala o nula vocalización. Si el coro canta en la
primera misa de la mañana, téngase en cuenta que la voz es más gruesa de lo
normal, ya que al dormir, la voz tiende a enronquecer permitiendo que la voz
salga más gruesa y no se llegue a notas altas. Vocalizar debe ser una rutina
antes del ensayo y misa.